No cabe duda que la relación con la familia es un aspecto muy importante para un correcto desarrollo integral del menor. Los diferentes miembros del entorno familiar se proporcionan entre si –o deberían hacerlo- protección, compañía, afecto, apoyo emocional… especialmente de padres a hijos, ya que estos segundos se encuentran en proceso de crecimiento.
Conscientes de la importancia de la familia como agente básico a partir del cual los pequeños desarrollan su personalidad, aprendizaje y valores, en los diferentes proyectos que llevamos a cabo en la Fundación Rafa Nadal tenemos muy presente la implicación y participación familiar.
Los objetivos en este sentido son claros: proporcionar apoyo y orientación a las familias para superar situaciones de dificultad, fomentar su participación en el proyecto y, en tercer lugar, ofrecerles alternativas de ocio y tiempo libre saludables, económicas y cercanas.
Por ejemplo, en el Centro Fundación Rafa Nadal, además de asesoramiento familiar -por medio de contactos diarios, charlas específicas, entrevistas de seguimiento…- se organizan actividades, como talleres o jornadas mensuales, en las que participan los diferentes miembros del núcleo familiar. Y los resultados en en este sentido son de los más positivos.
Aunque el papel educador de la familia ha ido variando conforme ha evolucionado la sociedad, no cabe duda de que éste es un ámbito de vital importancia durante la niñez. No lo olvidemos.