Son numerosas las diferencias entre el sistema educativo universitario español y el de Estados Unidos: la vida en el campus, el sistema de evaluación, el coste de la carrera, la relación entre estudiantes y entre éstos y los profesores, la presencia del deporte en los collage… El mes de agosto es cuando el nuevo curso empieza en las universidades americanas, así que es un buen momento para repasar las principales diferencias entre los dos países. Vamos por partes.
Mientras que en Estados Unidos la relación entre profesores y alumnos es a menudo más estrecha y amigable que en España, la relación entre los estudiantes suele basarse en el esfuerzo individual y es más competitiva. Además, en Estados Unidos es habitual tener compañeros diferentes en cada clase. Destaca también el school pride que existe en Estados Unidos, o lo que es lo mismo, el orgullo de pertenecer a una universidad en concreto.
En España, los estudiantes tienen que escoger, desde el primer año, cuál es el grado que quieren estudiar, es decir, la especialización que van a cursar. Sin embargo, en Estados Unidos el primer año se dedica al estudio de conocimientos más generales, y no es hasta el segundo año cuando el alumno debe elegir la carrera que quiere cursar.
Respecto al sistema de evaluación, en España tiene un peso importante el resultado obtenido en el examen final, mientras que en Estados Unidos se tienen más en cuenta otros aspectos como la asistencia a clase, la participación y, en definitiva, el trabajo realizado a la largo del curso.
El coste de los estudios universitarios es otra de las grandes diferencias entre los dos países. De hecho, en ningún lugar del mundo cuesta tanto ir a la universidad como en Estados Unidos. Algunas universidades privadas cuestan más de $50.000 al año, a lo que hay que sumar el gastos de alojamiento, libros, transporte…
Otra gran diferencia: el deporte es una actividad con importante peso dentro de las universidades americanas. Este motivo es el que nos llevó a crear el proyecto Study and Play, destinado a deportistas españoles que practican un deporte con regularidad y plena dedicación. A través de este programa les ofrecemos la posibilidad de acceder a las becas que conceden las universidades norteamericanas para combinar la competición y los estudios de una carrera universitaria.