La importancia de ser tu mismo, Centro Fundación Rafa Nadal de Madrid

En los Centros Fundación Rafa Nadal, trabajamos con menores en situación de vulnerabilidad a través de actividades educativas, deportivas y apoyo psicosocial. Creemos que brindar un espacio seguro y enriquecedor para los niños es fundamental para su desarrollo y bienestar emocional.

En este contexto, hace unos días realizamos una actividad muy especial en el Centro Fundación Rafa Nadal de Madrid, en la que se leyó el “Cuento de la Cebolla” a los menores. Esta fábula les enseña que a veces las personas tienen muchas capas y que mostramos solo una parte de lo que somos por miedo a ser juzgados.

El Cuento de la Cebolla:

“Había una vez un huerto lleno de hortalizas y árboles frutales. Daba gusto sentarse a la sombra de los árboles a contemplar aquel paisaje y escuchar el canto de los pájaros.

Un día empezaron a nacer unas cebollas especiales. Cada una tenía un color diferente: rojo, amarillo, naranja, morado… Los colores eran deslumbrantes, como el color de una mirada o de un bonito recuerdo. Después de falsas investigaciones, resultó que cada cebolla tenía dentro, en el mismísimo corazón (porque también las cebollas tienen su corazón), una piedra preciosa. Esta tenía un topacio, la otra un rubí, la de más allá una esmeralda…

Pero por alguna incomprensible razón se empezó a decir que aquello era peligroso, inadecuado y hasta vergonzoso. Total, que las bellísimas cebollas tuvieron que empezar a esconder su piedra preciosa con capas, cada vez más oscuras y feas, para disimular cómo eran por dentro. Hasta que empezaron a convertirse en unas cebollas de lo más vulgar.

Pasó entonces por allí un sabio, que gustaba sentarse a la sombra del huerto y que sabía tanto que entendía hasta el lenguaje de las cebollas y empezó a preguntarles: ‐

¿Por qué no eres como eres por dentro?

Y ellas le iban respondiendo:

‐Me obligaron a ser así…Me fueron poniendo capas… incluso yo me las puse para que no me dijeran… Algunas cebollas tenían hasta diez capas y ya casi ni se acordaban de por qué se pusieron las primeras.

Y al final el sabio se echó a llorar. Y cuando la gente lo vio llorando, pensó que llorar ante las cebollas era propio de personas inteligentes. Por eso todo el mundo sigue llorando cuando una cebolla nos abre su corazón. Y así será hasta el fin del mundo.”

Una vez leído el cuento, abrimos un espacio de debate para comentar entre todos el mensaje de esta fábula, para que los menores se hicieran partícipes opinando y explicando lo que habían entendido.

Tras esta reflexión, los niños y niñas dibujaron las diferentes capas de una cebolla y visibilizaron a través de ellas su personalidad y la manera que tienen de mostrarse al mundo.

Es importante que los menores y adolescentes se sientan seguros para hablar libremente de cualquier problema que puedan tener. La autoestima y el autocuidado son esenciales para su bienestar emocional. Por esta razón, en los Centros Fundación Rafa Nadal, trabajamos para fomentar estos valores y brindar un espacio en el que los menores puedan sentirse escuchados y apoyados.

La actividad del “Cuento de la Cebolla” fue una manera divertida y creativa de transmitir un mensaje importante sobre la importancia de ser uno mismo y no temer ser juzgado o de que no está bien juzgar a los demás porque todos somos diferentes.

A través de esta actividad, los niños y niñas aprendieron a expresarse y a ser más conscientes de su propia personalidad y emociones.

Esperamos que esta experiencia haya dejado una huella positiva en los menores y que lo aprendido impacte positivamente en su desarrollo personal.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *