En la India, el tenis se percibe como un deporte de élite. Este país cuenta con infraestructuras limitadas, entrenadores calificados solo en áreas urbanas, y una presencia casi insignificante en la India rural. Ante esta coyuntura, resulta casi imposible que los niños y niñas de zonas rurales y de entornos desfavorecidos puedan tener acceso a la práctica de tenis. La escuela NETS, en Anantapur, es una excepción, a la vez que un ejemplo de cómo el deporte puede derribar estereotipos y dejar de lado las diferencias sociales y de clases.
Los niños y niñas de NETS, el centro educativo y de tenis que creamos junto con la Fundación Vicente Ferrer en 2010, tienen la oportunidad de participar en torneos; un aliciente que les permite poner en práctica todo lo aprendido durante los entrenos, además de viajar a otras ciudades y compartir experiencias con otros niños y niñas.
El pasado mes de noviembre, 18 alumnos de NETS participaron en la SportIndia Tennis League, donde demostraron un alto nivel de juego, igualable al de otros niños procedentes de entornos urbanos y con mayores recursos. “La participación en este tipo de torneos es para ellos una oportunidad para observar y aprender. La mejora de su nivel de juego era un objetivo de este curso, y estamos contentos de ver que vamos por buen camino“, explica Vishal Vijaykumar, coordinador del centro.
Ramnjineyulu, alumno de NETS, se llevó la medalla en la categoría sub-16: “Estoy muy feliz de haber ganado, y mis padres y entrenadores están muy contentos y orgullosos. Al principio tenía miedo y dudas, pero su apoyo me dio confianza. El torneo fue muy competitivo, y una gran experiencia que espero poder volver a vivir”. Por su parte, la pequeña G Keerthana, de 12 años, explica: “Viajé a Bangalore con mis amigos y jugué mucho tenis con niños de diferentes lugares. ¡Disfruté mucho!”